Es casi ofensivo decirle a un profesor que está equivocado, sin embargo el reconocer que no somos infalibles nos muestra más humanos, sencillos y abiertos a aprender como nuestros alumnos.
Está robado científicamente que los seres humanos, sobre todo los adultos, tenemos la tendencia a "creer que sabemos más de lo que en realidad sabemos" obviamente esto no es ser presumido ni vanaglorioso, es una acción natural del cerebro, querer dar respuestas, y los docentes evidentemente queremos dar la respuesta.
Veamos que dicen los que saben: